No la infantil, no. La grande.
La prueba es que a veces Nene-kun se agarra a su cola (la del gato) y el gato lo arrastra por el salón sin el menor esfuerzo.
A estas alturas todavía no estoy segura de quién es más bruto, si el niño por agarrarse a la cola o el gato por tirar, en lugar de quedarse parado hasta que el niño se aburra, que sería lo normal.
De hecho, el gato es tan grande, y tan bruto, que más de una vez me ha tirado al suelo cuando he ido a ponerle de comer, así que empecé a sacarlo a la terraza cada vez que iba a rellenarle el comedero.
Que es muy a menudo.
Porque ese cuerpo hay que mantenerlo, claro.
Así que llamaba al gato, lo empujaba a la terraza, cerraba la puerta y le llenaba el comedero.
Puede que mi gato sea gordo, pero no tiene ni un gramo de tonto.
Pasados varios días, dejó de maullar para que le rellenara el comedero.
En su lugar, maullaba para que abriera la puerta de la terraza.
No solo esto, maullaba para que le abriera la puerta de la terraza, y luego seguía maullando para que me quedara en la cocina mientras él estaba fuera.
-Le dan miedo los coches -le dije a ZaraJota-. No quiere estar solo en la terraza.
-A lo mejor es porque cuando estábamos a bajo cero te lo olvidaste ahí toda una mañana.
ZaraJota es que es muy de echarte en cara toda la vida la hipotermia casi mortal de sus mascotas.
Así que, aprovechando que hacía mejor tiempo, empecé a dejar la puerta de la terraza abierta, pero el gato salía a la terraza y maullaba para llamarme de todas maneras.
-Creo que piensa que hay una correlación entre salir a la terraza y llenar el comedero -le dije a ZaraJota.
-Me pregunto por qué será.
-Posiblemente porque siempre lo saco a la terraza antes de llenarle el comedero.
ZaraJota puso los ojos en blanco, seguramente porque era incapaz de seguir un razonamiento de tan algo nivel.
-¿Sabes lo que eso significa? -le pregunté-. ¡Significa que le he enseñado un truco!
ZaraJota suspiró. Espero que no sea un síntoma temprano de insuficiencia respiratoria provocada por COVID, porque lo hemos mirado en el seguro y no cubre ingreso hospitalario por pandemia.
-No, Lorz -me dijo-. Significa que el gato te ha enseñado un truco a ti.
Sí, es otra forma de verlo.
- - - - - - - -
Ya hemos conseguido llegar al objetivo inicial y ahora nos hemos fijado una meta extra: si llegamos a 5000 €, todos los mecenas tendrán sugus.
¡No os quedéis sin participar!