Sí, este el post que subí por error la semana parada.
¿O quizá no?
Previously in Lorz...
La mortaja es el regalo de estas navidades.
Como decía, el tanatorio tenía estas salitas con un cristal: a un lado del cristal están los vivos, tomando café malísimo en los sofás más incómodos que ha concebido el hombre, y al otro el difunto, rodeado de flores. Muchas, muchas flores: en ramo, en corona, en algo parecido a un cesto... y todas ellas con banda tipo miss España, solo que en vez de miss España ponía el nombre de los oferentes (¿esa palabra existe?).
BISNIETOS, ponía una.
-Jajaja, que nombre tan feo -dije-. Desde luego, mira que hay padres crueles...
-Lo de BISNIETOS va por vosotros.
-Ah.
TATARANIETOS, ponía otra.
-De parte de los tataranietos -me dijeron, sin que preguntara ni nada.
Es lo malo de la familia: que te conocen y ya te ven venir.
Pero había bandas que no se leían, y eso que mi familia, aplastando la nariz contra el cristal, ponía empeño.
-Esa es la del grupo -decían.
Mi bisabuela era "del grupo". Gran parte de mi familia "es del grupo". Nunca he sabido lo que significa pero, dado que ninguno sabemos tocar ningún instrumento y la mayoría cantamos de puñetera pena, la única teoría razonable que se me ocurre es que pertenezcamos al IRA.
Sí, tendríais que oír las teorías no razonables. Son lo más.
-Y esa corona es de los primos.
Lo cual es lo mismo que no decir nada, porque mi familia llama "primos" tanto a los primos hermanos como a los primos segundos, terceros o incluso gente que no tienes muy claro como clasificar.
Por ejemplo: tengo una "prima" cuyo abuelo paterno era hermano de mi abuelo y cuya abuela paterna era hermana de mi bisabuela (pero no la madre de mi abuelo, sino su suegra).
Ser de pueblo es lo que tiene.
-¿Y esa?
-No sé, ¿veis lo que pone?
-Parece que pone no sé qué RDO.
-¿LERDO? -propuse, por ayudar.
-Será IZQUIERDO.
-¿Conocemos algún Izquierdo?
-¿O a algún Lerdo? -insistí, por si acaso.
-No, no conocemos ningún Izquierdo.
-Pues pone Izquierdo.
-Que no.
-Que sí.
-Bueno, pues ya lo veremos cuando la saquen.
-Ooooo... podemos entrar ahí.
Que quede claro: la idea no fue mía. De hecho, fui la primera en oponerse.
-¡No podemos entrar ahí!
-¿Por qué? ¿Te da cosa?
-¡No es que me dé cosa, es que está mal!
-Mujer, que más dará... Además, sería solo un momentito.
-No es que vayamos a hacerlo.
-No, no.
-Pero si lo hiciéramos no pasaría nada.
-No, no.
-Es solo por ver qué poner en la cinta.
-Sí, sí.
Llegado a ese punto me fui a buscar un café. Cuando mi madre y sus hermanas entran en bucle es como oír a un dragón de cuatro cabezas interpretando una canción de Pimpinela, a grito pelao y sin escuchar a los demás.
Cuando volví casi se me cae el café del susto: a este lado del cristal la salita estaba desierta. Al otro, entre el ataúd, las coronas de flores y demás, estaba mi familia al completo.
Mi madre empezó a hacerme gestos para que me acercara, y eso hice: a los no-muertos hay que respetarlos.
Y cuando estuve más cerca, vi que se ponía las manos en la boca para hacer de altavoz.
-¡PONE IZQUIERDO!
Estupendo: pues que vayan preparando otra porque creo que de esta me da un infarto.
Y para aquellos que ya leyeron el post cuando saltó la semana pasada, un bonus track.
Mi familia no tardó en salir.
-Jajaja, ¡la cara que has puesto!
-Me lo puedo imaginar: como si me fuera a dar una infarto.
-¡Sí! ¿Cómo lo has sabido?
-¡PORQUE CASI ME DA UN INFARTO!
-Mi hija hay que ver lo que exagerada que es.
-Espero que al menos hayáis disfrutado la experiencia.
-Uy, no nada -dijo mi madre-. ¡Tienen el aire acondicionado puesto! ¿Te lo puedes creer? ¡Ahí dentro te mueres de frío!
Claro. Por eso los usuarios ya vienen muertos de casa.
Continuará...
¿O quizá no?
Previously in Lorz...
La mortaja es el regalo de estas navidades.
Como decía, el tanatorio tenía estas salitas con un cristal: a un lado del cristal están los vivos, tomando café malísimo en los sofás más incómodos que ha concebido el hombre, y al otro el difunto, rodeado de flores. Muchas, muchas flores: en ramo, en corona, en algo parecido a un cesto... y todas ellas con banda tipo miss España, solo que en vez de miss España ponía el nombre de los oferentes (¿esa palabra existe?).
BISNIETOS, ponía una.
-Jajaja, que nombre tan feo -dije-. Desde luego, mira que hay padres crueles...
-Lo de BISNIETOS va por vosotros.
-Ah.
TATARANIETOS, ponía otra.
-De parte de los tataranietos -me dijeron, sin que preguntara ni nada.
Es lo malo de la familia: que te conocen y ya te ven venir.
Pero había bandas que no se leían, y eso que mi familia, aplastando la nariz contra el cristal, ponía empeño.
-Esa es la del grupo -decían.
Mi bisabuela era "del grupo". Gran parte de mi familia "es del grupo". Nunca he sabido lo que significa pero, dado que ninguno sabemos tocar ningún instrumento y la mayoría cantamos de puñetera pena, la única teoría razonable que se me ocurre es que pertenezcamos al IRA.
Sí, tendríais que oír las teorías no razonables. Son lo más.
-Y esa corona es de los primos.
Lo cual es lo mismo que no decir nada, porque mi familia llama "primos" tanto a los primos hermanos como a los primos segundos, terceros o incluso gente que no tienes muy claro como clasificar.
Por ejemplo: tengo una "prima" cuyo abuelo paterno era hermano de mi abuelo y cuya abuela paterna era hermana de mi bisabuela (pero no la madre de mi abuelo, sino su suegra).
Ser de pueblo es lo que tiene.
-¿Y esa?
-No sé, ¿veis lo que pone?
-Parece que pone no sé qué RDO.
-¿LERDO? -propuse, por ayudar.
-Será IZQUIERDO.
-¿Conocemos algún Izquierdo?
-¿O a algún Lerdo? -insistí, por si acaso.
-No, no conocemos ningún Izquierdo.
-Pues pone Izquierdo.
-Que no.
-Que sí.
-Bueno, pues ya lo veremos cuando la saquen.
-Ooooo... podemos entrar ahí.
Que quede claro: la idea no fue mía. De hecho, fui la primera en oponerse.
-¡No podemos entrar ahí!
-¿Por qué? ¿Te da cosa?
-¡No es que me dé cosa, es que está mal!
-Mujer, que más dará... Además, sería solo un momentito.
-No es que vayamos a hacerlo.
-No, no.
-Pero si lo hiciéramos no pasaría nada.
-No, no.
-Es solo por ver qué poner en la cinta.
-Sí, sí.
Llegado a ese punto me fui a buscar un café. Cuando mi madre y sus hermanas entran en bucle es como oír a un dragón de cuatro cabezas interpretando una canción de Pimpinela, a grito pelao y sin escuchar a los demás.
Cuando volví casi se me cae el café del susto: a este lado del cristal la salita estaba desierta. Al otro, entre el ataúd, las coronas de flores y demás, estaba mi familia al completo.
Mi madre empezó a hacerme gestos para que me acercara, y eso hice: a los no-muertos hay que respetarlos.
Y cuando estuve más cerca, vi que se ponía las manos en la boca para hacer de altavoz.
-¡PONE IZQUIERDO!
Estupendo: pues que vayan preparando otra porque creo que de esta me da un infarto.
Y para aquellos que ya leyeron el post cuando saltó la semana pasada, un bonus track.
Mi familia no tardó en salir.
-Jajaja, ¡la cara que has puesto!
-Me lo puedo imaginar: como si me fuera a dar una infarto.
-¡Sí! ¿Cómo lo has sabido?
-¡PORQUE CASI ME DA UN INFARTO!
-Mi hija hay que ver lo que exagerada que es.
-Espero que al menos hayáis disfrutado la experiencia.
-Uy, no nada -dijo mi madre-. ¡Tienen el aire acondicionado puesto! ¿Te lo puedes creer? ¡Ahí dentro te mueres de frío!
Claro. Por eso los usuarios ya vienen muertos de casa.
Continuará...