Y por si eso no fuera suficiente, a continuación os ofrezco una reciente anécdota, que me he permitido poner en verso para sumarme al espíritu festivo de estas fechas (también le he puesto música, lo que pasa es que me he levantado un poco afónica hoy).
Al vecino se le rompió
la bajante de fecales
que es el tubo que evacua
el agua sucia del váter.
[Resumiendo mucho]
El agua salió y salió
mucho tiempo y el hueco
del ascensor inundó
con mucha caca.
[MUCHA caca]
Muy pegadito al ascensor
hay un local comunitario
alquilado a un asador
que ruste pollos.
[Y cochinillo por encargo]
Y quiso la suerte
que el horno del asador
estuviera pegado
al hueco del ascensor.
[Lleno de caca]
Y si calientas líquidos
se tienden a evaporar
y el aire caliente
se tiende a elevar.
[Eso me han dicho]
Y el hueco del ascensor
es una chimenea natural
que ayuda al aire a subir
y el olor evacuar.
[Jaja, "caca", "evacuar". ¿Lo pilláis?]
Salvo que una vez que sube
todo el aire
solo hay una salida
que sea viable.
[Pausa dramática]
Las ventanas del último piso
que resulta ser mi casa
y desde hace muchos días
huele horriblemente a caca.
[Aquí me vendría bien un coro griego que repitiera "huele a caca"]
Ay, ay, mi casa huele a caca.
[Mucha caca]
Ay, ay, mi casa huele a caca.
[MUCHA caca]
Por suerte tengo hijos
y estoy acostumbrada
a toda clase de olores
y de sustancias.
[Y he tenido piojos hace poco. No es como si pudiera criticar la higiene de los demás]
Pero espero con ansia
que llegue el día
en que el seguro repare
la dichosa avería.
[De hecho la avería ya está reparada, es una licencia poética]
Mientras tanto os deseo
feliz 2017
y si no es feliz
siempre nos queda el siguiente.
[Chan]
De vez en cuando me entran unas ganas como de mudarme...