31 diciembre 2018

Solo sé que no sé nada, 4

Previously in Lorz...
Blanca navidad.


Mientras los niños y yo estábamos en El Puerto con la Tita y mi madre, ¿dónde estaba ZaraJota, el amor de mi vida, el padre de mis hijos y buen tío en general?
En casa.
Con wifi.
Y yo, ¿tenía wifi?
No, señores del jurado.
NO.
-Tita, ¿tienes wifi?
-Claro, niña.
Le di a buscar red en el móvil y efectivamente me salían varias redes, todas ellas con su candadito porque la gente hoy en día ya no sabe lo que es la generosidad.
-¿Y cuál es la tuya?
-Churruflex
-Eh... ya, pero me salen varias. ¿Sabes cuál es la tuya?
-Fibra.
Miré en el móvil todas las redes disponibles y había cinco Churruflex_Fibra.
Vale, no son tantas. Puedo probar en todas.
-¿Y la contraseña?
-Contraseña1.
Me puse a probar Contraseña1 en todas las Churruflex_Fibra, y no pude acceder a ninguna.
-¿Te acuerdas de si pusiste Contraseña1 en mayúscula o minúscula?
-¿Contraseña1?
-La contraseña del wifi.
-No, si el técnico me la cambió por EstaEsLaContraseñaDelWifi la última vez que vino.
-¿Y eso?
-Para que no se me olvidara.
Vale, no pasa nada. Solo son cinco Churruflex_Fibra, puedo escribir EstaEsLaContraseñaDelWifi en el bloc de notas del móvil, y copiarla y pegarla para probar en las cinco.
Fácil.
No pude acceder a ninguna.
-¿PERO QUÉ COJONES LE PASA A MI FAMILIA CON EL PUÑETERO WIFI?
Primero mi padre y ahora...
¡Mi padre!
Mi padre padece un severo caso de memoria fotográfica y es capaz de recordar las contraseñas del wifi, incluso las que son una mezcla de números y letras en mayúscula y minúscula. Que lleve veinte años trabajando en el soporte técnico de Churruflex lo mismo tiene algo que ver.
Le mandé un mensaje.
"Papá, no puedo conectarme al wifi de la Tita"
"La contraseña es EstaEsLaContraseñaDelWifi"
"Ya, lo que no sé es la red"
"¿Has probado a mirarlo en el módem?"
Ya salió el listo que todo lo sabe.

24 diciembre 2018

Solo sé que no sé nada, 3

Previously in Lorz...
Si alguna vez necesitáis una coartada, no se la pidáis a la Tita del Cuerto y del Sur y de Todos los Santos.


Cuando llegamos a casa de la Tita, ella estaba, mira qué casualidad, a punto de ponerse a decorar la casa, y tenía todos los adornos navideños perfectamente organizados en la mesa, que parecía aquello un especial del ¡Hola!.
-Niños, ¿queréis ayudarme a decorar el árbol?
-¡Siiiiii!
-Lorz, tú no.
-Jo.
Desde que tengo hijos todo el mundo se empeña en tratarme como un adulto, es horrible.
-Bueno, niños, esperad un momento que traigo el árbol.
Los niños se quedaron en el salón expectantes hasta que mi tía apareció con, no sé cómo explicarlo mejor, cuatro ramas peladas y blancas metidas en un jarrón de cristal.
Muy bonitas. Muy de catálogo de decoración.
Pero lo que se dice un árbol, como que no.
A los niños se les cayó la mandíbula hasta el suelo. O sea: la decepción. Nena-chan es una optimista de la vida, pero en aquel momento estaba claro que ni siquiera ella se sentía capaz de arreglar aquello. 
-Eh... ¿Tita? -dijo-. No tiene hojas.
Que lo mismo es que la Tita no se había dado cuenta, ¿eh? No perdamos la esperanza.
La tita miró el jarrón.
-Ya, es que no es un árbol-árbol. Son unas ramitas, de decoración. Queda muy fino y elegante.
Los niños miraron a la Tita, intentando decidir si se había vuelto loca o se estaba burlando de ellos.
-Ajá.
-A... a mí me gusta mucho, ya verás que bien queda.
La Tita estaba perdiendo convicción, probablemente porque mi madre y yo nos estábamos riendo de la situación disimuladamente.
Bueno, disimuladamente no.
Ahí, en toda la cara de los tres.
-Bueno -insistió la Tita-, vamos a decorarlo, ya verás qué bien queda.
-¿Tienes bolas?
-Eh... no... eh... yo le pongo unos... adornitos... mira.
-¿Todos son rojos?
-Sí, rojos y dorados. Queda muy fino y elegante.
Nena-chan suspiró: ni hojas, ni bolas, ni colorines... Eso ni era un árbol de navidad ni era nada. Pero ya os he dicho que es una optimista de la vida, así que ayudó a mi tía a decorar aquello, y Nene-kun siempre imita a su hermana, así que "decoraron" el "árbol" y les quedó muy bien.
Muy fino y elegante.
-Ahora me vais a ayudar con el belén.
-Vale.
Las cosas como son: a esas alturas Nena-chan desconfiaba.
-Las figuritas ya están puestas -dijo mi tía, porque una cosas es el amor a los sobrinos y otra dejarles manipular figuras de cerámica pintadas a mano-. Pero me podéis ayudar a echar un poquito de nieve por encima.
Mi tía sacó entonces una bolsa de nieve de porexpán, la abrió, cogió un pellizquito y los espolvoreó suavemente sobre las figuritas del belén.
A los niños se les pusieron los ojos como bolillas. Agarraron la bolsa, empezaron a coger nieve a puñaos y a arrojarla en plan temporal sobre el belén.
Había nieve por todas partes.
POR TODAS.
Si la Virgen llevara bragas, se había encontrado nieve debajo.
La nieve superó la repisa donde estaba el belén, inundó la de abajo, llegó al suelo, y se expandió por la casa, afectando especialmente a la ropa y al pelo de los niños.
Cuando la bolsa se quedó vacía, los niños me llamaron.
-Mira, mamá, ¿a que ha quedado bonito?
-Uy, sí, precioso.
Muy fino y elegante.

17 diciembre 2018

Solo sé que no sé nada, 2

Previously in Lorz...
Yo qué sé.

Llegó un punto en que la única que no sabía el secreto de la sorpresa era Nena-chan, precisamente la persona que iba a darla.
Eso sí, ella estaba emocionadísima.
El día D a la hora H, mi madre y yo nos subimos al tren con los dos niños, los abrigos, dos maletas, su bolso, mi mochila, la mochila de los juguetes, la bolsa de la merienda, la bolsa con los sándwiches de Rodilla que un niño más grande y más fuerte que ella le había obligado a comprar, un ramo de flores y una caja con pasteles.
-Lo bueno de ir a casa de tu tía -me dijo mi madre-, es que tiene de todo y no hace falta que llevemos mucho equipaje.
Yo no hice ningún comentario, pero la verdad es que si eso le parecía poco equipaje me gustaría saber exactamente qué llevaba cuando se fue con mi padre a recorrer Italia, y si alquilaron un remolque o directamente un camión de dos cuerpos.
Mientras nosotras colocábamos la impedimenta, Nena-chan y Nene-kun habían localizado sus asientos, habían bajado las bandejas y dispuesto los juguetes en lo más parecido posible a un bazar.
Mi madre se quedó boquiabierta.
-Estos niños, ¿es que no se extrañan de nada?
Que una vez más me tuve que callar, pero cómo se van a extrañar de nada estos niños, si les hacemos cada cosa que ya están curados de espanto con todo.
Entre nuestros grandes hits vacacionales: tomar un tren, un cercanías y un autobús que nos dejó en mitad de un descampado, desde donde tuvimos que cargar con los dos niños y toda la parafernalia hasta un cámping; alquilar un coche automático que ZaraJota claramente no sabía manejar, y del que nuestras costillas todavía se acuerdan; equivocarnos de parada y bajarnos dos antes, y tener que andar dos kilómetros por un polígono desierto y bajo cero; perdernos en mitad del bosque, por supuesto a pie y con un jabalí acechando; y por favor no olvidemos aquella vez que me pareció una idea grandiosa ir con Nena-chan, entonces un Bebé-chan de un año, y equipaje para un mes a Barcelona, en metro y vuelta hasta la Boquería para ver a la familia de ZaraJota, después en cercanías hasta Blanes, luego en autobús hasta la casa del Tito, autobús y cercanías de vuelta para Barcelona y tren hasta Valencia, donde nos estaba esperando ZaraJota. Y luego que por qué me duele la espalda. 
En cualquier caso, los niños estaban encantados con el viaje, la sorpresa, los juguetes y las chuches que les había comprado con la esperanza de comérmelas yo.
Vana esperanza, diría. 
Además yo empecé en plan telonero a caldear el ambiente.
-¿Dónde vamos?
-¡Al Cuerto de Santa María!
-¿A quién vamos a ver?
-A la tita del Cuerto y del Sur.
Y de Todos los Santos, amén. 
-¿Y ella lo sabe?
-Nooooooo, es una SORPRESA.
-Anda, ¿y cómo vamos a hacer para que nos abra el portal sin enterarse?
-...
-Ya sé, podemos decir que somos un cartero comercial.
-¿Cartero comercial?
-Es el señor que deja en el buzón los folletos de juguetes.
Entre otras muchas mierdas que no voy a entrar a describir. 
-Ahhhh.
-A ver, Nena-chan, cómo lo dices.
-Cartero comercial.
-No, no. La voz más grave.
-Cartero comercial. 
-Perfecto. Sigue practicando hasta que lleguemos, que mamá se va echar una siesta.
Pues como diez mil horas más tarde, porque los viajes con los niños siempre son eternos, llegamos a la puerta de la Tita del Cuerto, del Sur y de Todos los Santos. Le endosamos el ramo de flores a la niña, los pasteles al niño, y llamamos al telefonillo.
-Holaaaaa, ¿quién es?
-Cartero comercial. 
-Ah, sí, pase, pase.
La verdad sea dicha: Dios no llamó a mi tía para el mundo de la actuación. Pero la niña estaba tan emocionada que le dio lo mismo.
Subimos a casa de mi tía, plantamos a la niña, al niño, el ramo de flores y los pasteles delante de la puerta, llamamos al timbre y mi madre y yo nos escondimos en el hueco de la escalera, riéndonos discretamente a todo volumen.
Dios tampoco nos ha llamado para ser actrices, para qué nos vamos a engañar.
Mi tía abrió la puerta y se encontró el panorama niña, niño, flores, pastel.
-Ay, qué sorpresa más grandeeeeee.
Lo siento, Tita, este año el Oscar tampoco.
Mi madre y yo salimos del escondite y entramos todos a la casa, donde mi tía estaba explicándoles a los niños que ella no se lo esperaba PARA NADA.
-Ay, ay, como no habéis avisado no tengo juguetes para vosotros.
-Bueno, no pasa nada -dije.
-¿Qué tal el viaje?
-Mátame -mi madre me dio un codazo. Es que está en contra de la violencia en general, pero no contra mí en concreto.
-Ay, pobres. ¿Queréis tomar algo? Tengo zumos, colacao, franfurkechu, chocolate y galletas. Pero de casualidad, ¿eh? Porque yo no tenía ni idea de que veníais. 
Menos mal que era un viaje sorpresa, porque si llegamos a estar encubriendo un asesinato lo llevábamos claro.

06 diciembre 2018

Solo sé que no sé nada

Bueeeeeno, estoy escribiendo directamente en la app de blogger para móvil y tiene literalmente 3 (tres) opciones así que puede pasar cualquier cosa, desde que esto se suba un martes a que se suba tres veces al día o nunca, pero quién dijo miedo.

La culpa de todo la tiene la comunidad de Madrid por declarar el 7 de diciembre no lectivo.
Alguien se tenía que quedar en casa con los niños y me tocó a mí en un sorteo, que para mí que hubo tongo porque ZaraJota dijo:
-Elige un número del 1 al 10.
-38.
-¡Justo el que estaba pensando!
-Jo.
-Lo siento, Lorz, el azar es así.
Ya que tenía que gastar un día de vacaciones, le dije a mi madre que si le apetecía que nos fuéramos a las jornadas de puertas abiertas del congreso de los diputados, que es una cosa muy chula que siempre he querido hacer con mi madre.
-Ay, pues pensaba irme al Puerto para darle una sorpresa a la Tita. Pero me puedo llevar a los niños.
-Bueno, si vas con los niños yo también voy.
-Bien pensado, Lorz, tampoco tengo tanto interés por ir.
-¡Que sí! ¡Ya verás lo bien que nos lo pasamos!
-Me lo pasaría mejor si fuera sola con mis nietos.
-¡Y conmigo!
-Yo. Con mis nietos. Sola.
Empezaba a sospechar que mi madre quería decirme algo, pero no sabía qué y estaba demasiado emocionada con lo de darle una sorpresa a la Tita.
No paraba de imaginarme su cara cuando abriera la puerta, cuando nos viera a los cuatro, cuando le diera un soponcio, cuando la reanimaran...
Estaba tan emocionada que se lo conté a todo el mundo. ¡Tres hurras por WhatsApp!
Pero no a la Tita. Porque era una sorpresa, claro.
Hasta dos días antes del puente, cuando llegó un mensaje del Primo Guapo al Grupo Reprimos:
"Lorz, ¿vais a venir al pueblo en el puente?".
A lo que yo muy sabiamente contesté algo así como:
"Pero si ya te he dicho que en el puente vamos al Puerto para darle una sorpresa a la Tita".
En el grupo se hizo un silencio que se podía cortar con un cuchillo y entonces me di cuenta: la Tita también está en el grupo.
Mierda, mierda, mierda, mierda.
Lorz, elimina mensaje.
¿Eliminar para mí o eliminar para todos?
Eliminar para mí.
¡Nonononononono!
Mierda, mierda, mierda, mierda.
Entonces me fui al Grupo Familia, en el que NO está la tita.
"MADRE, LA HE LIADO PARDA"
"Lorz, sigue el protocolo: corta la luz y echa arena al microondas hasta que se apague el fuego"
"No, eso no"
"..."
"Vale, eso también. Pero además he chafado la sorpresa de la Tita"
"No te preocupes Lorz"
"CÓMO NO VOY A PREOCUPARME HE CHAFADO LA SORPRESA SE VA A DAR CUENTA JODER JODER JODER"
"La Tita ya lo sabe"
"?"
"¿Cómo vamos a presentarnos cuatro personas en su casa sin avisar? Se lo he dicho. Y ella va a fingir sorpresa porque parece hacerle ilusión a cierta persona infantil e inmadura. Y a los niños también".
Vale. La Tita leerá el mensaje y fingirá no haberlo leído para que yo no me dé cuenta de que sabe que vamos y poder fingir sorpresa.
Efectivamente, la Tita no dijo mi mu.
La sorpresa, o al menos el fingimiento de la sorpresa, estaba a salvo.
Todo lo a salvo que puede estar algo en lo que yo tenga que ver.
Porque aquella tarde me di cuenta de que mi abrigo tenía un agujero enorme y entré en pánico porque soy muy friolera.
Así que volví al grupo.
"La estación espacial internacional me ha dicho que tengo tal bujero en el abrigo que lo están viendo hasta ellos.
Tita,
cuando vayamos a verte este finde, ¿me puedes llevar de shopping?".
A mi favor debo decir que esa vez no fue necesario que se hiciera el silencio para que yo me diera cuenta.
Todo lo demás fue exactamente igual:
Mierda, mierda, mierda, mierda.
Lorz, elimina mensaje.
¿Eliminar para mí o eliminar para todos?
Eliminar para mí.
¡Nonononononono!
Mierda, mierda, mierda, mierda.
Entonces me fui al Grupo Familia, en el que NO está la tita.
"MADRE, LA HE LIADO PARDA"
"Hija, plantéate hacerte crudivegana, que no ganamos para incendios"
"No, eso no. La Tita. Que la he vuelto a liar. Con la sorpresa"
"Ya te he dicho que ella lo sabe"
"Pero no sabe que yo sé que ella lo sabe"
"Sí lo sabe"
"¿La Tita sabe que yo sé que ella lo sabe?"
"Sí"
"Pues si la Tita sabe que yo sé que ella lo sabe. ¿Por qué vamos a hacer como si fuera una sorpresa?"
"Pues si te digo la verdad, no lo sé"
Mira que lo sabía...

03 diciembre 2018

El pequeño Spider-error

Cometí un error, ¿vale?
Eran las ocho de la mañana, iba en el autobús con los dos niños, las mochilas, los paraguas, de pie, intentando a la vez que los críos no acabaran incrustados contra el parabrisas o contra un culo, no perder ninguna pieza, que no me robaran el móvil (otra vez) y sonarle los mocos a Nene-kun, todo a la vez. 
Entonces pasó a nuestro lado un autobús con publicidad de Billy Elliot
-Mamá -preguntó Nena-chan, que desde que aprendió a leer tiene más peligro que un pirómano en una gasolinera-, ¿quién es Billy Elliot?
¿Os he dicho ya que eran las ocho de la mañana?
Tenedlo en cuenta. 
Porque sin pensarlo le contesté: 
-Spiderman de pequeño. 
Seguramente estáis pensando que sí, que fue un error, porque el niño de Billy Elliot era Jamie Bell, mientras que el nuevo Spiderman, Tom Holland, era el niño de Lo imposible.
Pues no. Porque no estábamos hablando de la película, sino del musical, así que...




-¿Billy Elliot ES Spiderman?
-No, Spiderman ERA Billy Elliot, cuando era pequeño y eso. Venga, que es nuestra parada y nos tenemos que bajar.
Y me olvidé totalmente del asunto.
Pero Nena-chan no.
Pasados unos días ZaraJota Me dijo que Nena-chan quería ver Billy Elliot.
-Está emperrada con ir a ver Billy Elliot. Se ve que alguien le ha dicho que Billy Elliot es Spiderman de pequeño.
-...
-Has sido tú, ¿verdad?
-...
-¡Lorz! ¡No le digas tonterías a la niña!
-¡No son tonterías! -le dije-. Es... ¡frikismo básico!
-Ay, Lorz. A ver cómo lo arreglo.
ZaraJota es que es así: se cree supermaduro y superresponsable solo porque es él quien recoge a los niños del colegio, les da de merendar, los lleva a extraescolares, les ayuda con los deberes, los baña, les da la cena, se asegura de que se laven los dientes y los acuesta.
-Nena-chan, Billy Elliot no es Spiderman de pequeño.
-¿No?
-No. Mamá te ha dicho eso porque el actor que hace de Spiderman también hacía de Billy Elliot cuando era pequeño.
-¿El actor?
-Eso es.
-Entonces... ¿Spiderman no existe de verdad?
Arregla eso ahora, señor supermaduro.




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Arreglado. 
El sábado pasado fuimos a ver Spider-Man: Un nuevo universo, que es una maravilla y recomiendo 100% (aunque quizá no para niños tan pequeños). Ahora sabemos que hay muchos universos paralelos con muchos Spiderman diferentes. 
¿Hay un universo en el que a Billy Elliot le picara una araña y se transformara en Spiderman? No veo por qué no.