Previously in Lorz...
Juraría que las vacaciones fueron mucho más breves que su crónica.
La casa del Tito no solo está en lo más alto de la más alta montaña, sino que además está construida sobre una superficie muy pequeña, y para ganar espacio hubo que hacerla hacia arriba. Muy hacia arriba.En plan torre.
Y claro, la casa es toda recovecos de escaleras estrechitas con escalones diminutos en los que apenas cabe un pie.
A Bebe-chan le encantó.
-¿Uno-dos-tres? -preguntaba, señalando las escaleras porque, debido a mi manía de contar en voz alta los escalones que subo y bajo con el carrito a cuestas, Bebé-chan ha llegado a la conclusión de que las escaleras se llaman "el uno", y subir y bajar se dice "uno-dos-tres".
Cada vez que nos despistábamos se ponía a uno-dos-tres, y el problema era que nos temíamos que acabara en uno-dos-tres-PUM, sobretodo porque la niña es un poco sonámbula y a veces le da por correr cuando estamos dormidos, y así no se puede.
-Va a tener que dormir con nosotros -le dije a Zarajota.
Y así fue como Bebé-chan acabó durmiendo en un colchón en el suelo al lado de nuestra cama, habiendo dos habitaciones vacías, una de ellas con dos camas y un sofá.
El problema es, por decirlo finamente, que Zarajota y yo queríamos sexo. El uno con el otro, que ya os veo venir. Teníamos muchísima fe en la capacidad de la playa para agotar a Bebechan y habíamos llevado la friolera de cuatro preservativos (4) para nuestra estancia de cuatro días (4).
Nuestro error fue que no contamos con la capacidad de la playa para agotarnos a nosotros también.
En fin, los comienzos fueron poco prometedores.
Y los finales.
Y los medios.
La verdad es que es sorprendente lo mucho que puede llegar a cansar levantarse a las ocho, ordenar un poco, bajar a la playa, subir para comer, ir de excursión, subir para cenar, bajar un par de horas más al parque y volver a subir y todo sin parar de pasártelo en grande.
Al fin, uno de los días Bebé-chan se quedó dormida después de comer y, lo que es más importante, en su colchón y, más importante aún, de cara a la pared.
Por si acaso.
Zarajota y yo comprobamos todas sus constantes vitales para asegurarnos de que estaba total, absoluta y profundamente dormida.
Y lo estaba.
¡JijijijijijijijooooooJOMUAJAJA!
En fin.
Esa misma tarde, ya con los deberes conyugales cumplidos, estábamos haciendo el vago en el sofá mientras Bebé-chan jugaba con sus muñequitos de Ben y Holly.
-¿Juegas con Ben y Holly? -le pregunté.
-TI -contestó educadamente la nena, en vez de mandarme al peo por preguntar obviedades-. MUAC.
-¡Ohhh! ¿Se quieren mucho, verdad?
-¡MUAC! ¡MUAC! ¡MUAC!
-Cuántos besos! Se nota que son muy amigos.
Y que tienen la cabeza de plástico y no les duelen los cabezazos que les estás dando, eso también.
-¡MUAC! ¡MUAC! ¡MUAC!
-Muy muy amig...
No pude terminar la frase porque Ben y Holly habían abandonado la posición vertical. Ahora Ben estaba encima de Holly...
-¡MUAC! ¡MUAC! ¡MUAC! ¡MUAC!
Y así fue como los otros tres preservativos (3) se quedaron sin usar.
¿Continuará?
¿En serio?
Pero, ¿cuánto va a durar estoooo?
Bebe-Chan tiene ojos en la espalada que se abren cuando los de enfrente duermen... Es la única explicación.
ResponderEliminarPor lo demás, si ya la niña los había visto usar un preservativo, podrían haber usado los otros tres... O, al menos, dos y le último para hacerle un globito y que se entretuviera mientras tanto.
jajajaja no pasa nada, a fin de cuentas todos hemos visto a nuestros viejos en el ajo y no le ha pasado nada a nuestra mente o lo que sea, ¿O si?...jajaja
ResponderEliminarBesos y salud
Upssss. Jajajaja. Besotes.
ResponderEliminarJejejejeeee. Entiendo que os haya dado un corte tremendo que bebé-Chán representara de vuestro tiki-tiki con muñecos, pero recordad que bebé-Chán no es un bebé cualquiera. Venga, lorz... ¡que no es más que biología aplicada! :-)
ResponderEliminar¡Escribe un libro!
ResponderEliminarJajaja qué lista la niña! A mi me da un pánico que me pillen mis hijos..
ResponderEliminarpara Genin: ¡nooooooo! no todos hemos visto a nuestros viejos en el ajo! po favor!
ResponderEliminarSi dejais los preservativos podreis hacerle un hermanito y que duerman juntos en otro cuarto y se vigilen mutuamente!
Besos