Ayer fui a una entrevista de trabajo de lo mío.
Me lavé el pelo por la mañana pero cuando llegé a casa después de trabajar decidí que lo tenía esqueroso, así que me lo volví a lavar, y luego me enrollé una toalla en la cabeza y me senté en el sofá a ver House.
Tengo tiempo de sobra, pensé.
Total, la entrevista no es hasta las 18:00, con que salga de casa a las seis y media...
Oh, mierdaaaaaa...
De pronto estaba con el secador de pelo en una mano y el maquillaje en crema en la otra, mientras corría de un lado a otro del piso en busca de unos calcetines que no tuvieran ni colorines, ni dibujitos, ni borlas, y no sé cómo me cayó un pegote de crema en la pestaña del ojo izquierdo.
No tenía tiempo de echarme agua en la cara y empezar de nuevo con las capas y capas de pintura, así que me froté el ojo con un pedacito de papel higiénico, y salí corriendo de casa.
Rápidamente me di cuenta de que el papel higiénico no había sido suficiente. Cada vez que parpadeaba me quedaban tres rayitas nude beige suave 021 en el cristal de las gafas, y a veces se me quedaban las pestañas pegadas y no había manera de abrir el ojo.
Sospecho que parecía un poco tonta.
Con la cosa del ojo iba distraída (como siempre, más o menos) y así como por instinto cogí sin querer el camino del trabajo, y no me di cuenta hasta que me bajé del metro y pensé, oye, ¿yo no había hecho esto ya hoy?
Media vuelta.
A estas alturas era tarde, pero tarde, tarde, y llovía, y había huelga de metro y colapso de autobuses, y yo no podía correr mucho porque a La Cosa Purulenta y Asquerosa Etcétera Etcétera (la de las manos se me fue con el jabón casero de Latita, pero la de los pies ahí sigue) no le gustan los zapatos de ir a entrevistas de trabajo, y trataba de devorarlos según iba andando.
Para cuando llegué la entrevista ya había empezado.
-Y el contrato -explicaba la entrevistadora-, es de tipo mercantil.
Anda y que le pique un pollo.
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Contrato mercantil: te pagan por horas, no cotizas a la seguridad social y te retienen un güevo (aproximadamente).
Buue!...vaya cosa tan normal..si yo te contara o contase...!
ResponderEliminarY eso, niños y niñas, es lo que se llama aprovechar la tarde.
ResponderEliminarPara que luego digas que no te diviertes..
sí cotizas a la seguridad social porque tú te pagas los autónomos.
ResponderEliminarves como las viej... ancianas no son tan malas?
Mierda! Ojalá me lo hubiera explicado antes de que les hiciera un calvo y les escupiera en un ojo!
ResponderEliminarPd: A lo que me refería es que el contrato no incluye la cotización; lo que uno haga por su cuenta ya es otra cosa. Pero claro, a ver como le digo yo a nadie que soy autónoma, que no soy capaz ni de abrir una lata de atún.
No, es más divertido ser otro; Nicole Kidman, por ejemplo XD!!!
ResponderEliminarGracias mil, me he puesto coloraíta y todo.
Estoy seguro de que si votamos tus comentaristas habituales preferimos que sigas en contacto con las viej... ancianas
ResponderEliminar¡Tú, Errol, vuelve a escribir en tu blog!
ResponderEliminarnicole kidman... ummm...
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