23 noviembre 2016

El copipeis


Esto lo publiqué originalmente en facebook, porque pensé que era demasiado serio para un aquí, y después descubrí que hay gente que no tiene/no usa facebook (¡el fin de la civilización occidental tal y cómo la conocemos!) y que querían leerlo también (¿por qué? ¿POR QUÉ?). 
Además esta semana estoy bastante saturada de actividades y me viene fenomenal hacer un copipeis, para qué nos vamos a engañar. 




Hola, soy Lorz y vengo aquí a indignarme. 
[Adelante, Lorz. Para eso están las redes sociales, Lorz, ¿no lo sabías?] 
Debido a Lo Que Le Pasa a #Bebekun, o, mejor dicho, debido a Que No Tenemos Ni Puta Idea De Lo Que Le Pasa a #Bebekun, estoy leyendo todo lo que cae en mis manos sobre pediatría, pedagogía, psicología y zombis (por variar) y de vez en cuando me estoy encontrando con artículos de presuntos expertos que recomiendan a las mamás, nunca a los papás, que dediquen menos tiempo a las labores domésticas y más tiempo a estar con los niños. 
Ajá. 
Menos mal que nos lo dicen, porque a mí solita jamás se me hubiera ocurrido pensar que el problema de los niños actuales es que a las mujeres nos gusta mucho fregar. Pues nada, soltamos la fregona y solucionado, ¿no?
Por desgracia los expertos se olvidan de algún detalle sin importancia como que los niños necesitan MUCHO estar con sus padres, sí, pero también necesitan otras cosas. 
Necesitan, por ejemplo, comer sano. Para tener siempre en casa frutas y verduras frescas hay que ir a la compra al menos un par de veces por semana. Para convertirlas en una cena saludable se necesita tiempo. Después hay que recoger la mesa y fregar los platos, manías tontas que tiene una. 
Los niños también, al menos cuando salen a la calle, necesitan ropa relativamente limpia. Como mínimo, que no tenga costras de vómito seco (ni húmedo). Sorprendentemente la ropa no se mete sola en la lavadora, no se tiende sola ni se dobla o plancha sola. 
Por último, los niños necesitan un entorno mínimamente higiénico. No hablo de asepsia total; es bien sabido que un poco de mierda es buenísima para el sistema inmunológico. Pero un poco. De vez en cuando, aunque solo sea porque los vecinos se quejan del olor, hay que barrer, fregar y sacar la basura. 
Y aunque en mi casa todas las labores domésticas se hacen en familia, los expertos no consideran que esto sea "tiempo de calidad", y por tanto no cuenta. 
Vayaaaa...
Hay otra cosa que los expertos parecen olvidar: muchas mujeres dedican una parte considerable de su tiempo a trabajar fuera de casa. Bastante más tiempo, incluso, del que dedican a las dichosas tareas domésticas.
Sorprendente pero cierto. 
Y lo hacen, en muchos casos, porque hay una cosa que los niños también necesitan en cantidades industriales: dinero.
No porque vivamos en una sociedad consumista en la que primemos los objetos materiales sobre las relaciones personales, y hay que ver los niños de hoy que tienen de todo y no aprecian nada, no como en mis tiempos que no teníamos nada y éramos mucho más felices (¿en serio? ¿de verdad los niños eran más felices en una época en la que estaba bien visto pegarles?). No estoy hablando de juguetes, videojuegos o ropa de marca. Me refiero a cosas que los niños necesitan DE VERDAD como un techo sobre sus cabezas, calefacción en invierno, frutas y verduras frescas, gafas, visitas al dentista, medicamentos o libros. Si además tienes un niño con necesidades especiales puede que tengas que cubrirlas: me refiero a cosas tan triviales como las mil extraescolares de los niños con TDAH, los productos de higiene específicos para pieles atópicas, los productos sin gluten para celíacos... por no meterme en casos más dramáticos. 
A los presuntos expertos les costará creerlo, pero las mamás somos capaces de tener en cuenta TODAS las necesidades de nuestros hijos CONTINUAMENTE y A LA VEZ, y priorizar la más urgente en cada momento. A veces eso significa que nos pasamos toda la tarde jugando y luego cenamos cualquier porquería precocinada, pero eso no siempre es posible, y al día siguiente tocará ir al mercado, comprar verduras y hacer algo decente para cenar. 
Las mamás somos generales en campaña: estamos en guerra contra el tiempo. No necesitamos que ningún experto de a treinta euros la columna nos diga que tenemos que estar más con nuestros hijos: lo sabemos. Si no lo hacemos es porque humanamente no podemos, y ya nos sentimos lo bastante culpables sin su ayuda, gracias. 
Señores expertos, háganle un favor a la raza humana: en vez de dedicar sus revistas, webs, boletines y blogs para regodearse en su superioridad moral y decirnos a las madres que lo estamos haciendo mal, úsenlos para pedir a los gobiernos políticas de conciliación; que la seguridad social cubra gafas, dentista o cremas; que se subvencionen los libros de texto; o que se cubran las necesidades especiales de todos los niños, porque todos las tienen, en mayor o menor medida. 
Esto SÍ sería una gran ayuda. 
Para sentirnos culpables, se lo aseguro, no necesitamos ninguna.

18 comentarios:

Genín dijo...

Pues te ha quedado fantástica la indignación, no me hubiera enterado si no la hubieras publicado aquí porque yo no uso redes sociales, FB y esas vainas, no me van, así que te doy las gracias por la idea de publicar aquí y si hay mas, mejor...
Besos y salud

estrella dijo...

¡Bien dicho!

dibujosdenube dijo...

Tal cual. Mis felicitaciones: no se puede decir más claro.

^^

Necio Hutopo dijo...

EL problema es de los bebes y niños en general, que no son como se los imaginan los expertos... Supongo que por llevarles la contraria.

Beatriz Olmos dijo...

Ironicamente acabo de compartir esto en mi facebook... jejeje. Me ha llegao, oye

Ana Iglesias dijo...

Aaaaaaamen Lorz, eres mi héroa (es que heroína me suena mal, lo siento)

Mi Álter Ego dijo...

Me gusta cuando te pones seria. La verdad es que siempre intentan hacer sentir culpable al ciudadano de a pie. Una lástima. Besotes!!!

Puck dijo...

Yo soy de las que usa FB en mi cumpleaños y en Navidad, pero voy a compartirlo ahora mismo. Que lástima que tengas tanta razón. Firmado:madre de bebe de 3 meses a punto de reincorporarse al trabajo :c

Anónimo dijo...

Madre mía, y ningún experto me había dicho que no soy la única pasando por esto. Gracias, me has llegado al alma, me he visto tan reflejada... ah, y no se si te ha pasado, pero a mí me han dicho algunas conocidas (solteras y sin niños) que la culpa de que simpre esté tan atareada es mía por permitir que mis hijos se apeguen tanto a mí... De verdad, espero que todo marche bien para ti y tu familia.

Rob Nobody dijo...

Y que se aplique la ley, corcho! que mucha política de conciliación y mucha historia, pero ¿cuantas empresas obligan, si OBLIGAN, a sus empleados a hacer horas extras (cobradas o no) y si no tragan, a la calle?

Madreconcarné dijo...

No se puede tener más razón.
Ah, y que no se te olvide que tenemos que realizarnos como personas al margen del hogar y dedicarle tiempo a la relación de pareja. La leche en bote.

Fonsoelegido dijo...

¡Aplausos! Estoy de acuerdo contigo

Fonsoelegido dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Aurora dijo...

¡Ole!

pseudosocióloga dijo...

Yo tengo pero no uso el libro de las caras.
Yo ya lloré cuando un día mi hija(con cuatro añitos) me dijo que no me pediría nunca más ningún disfraz pero que no hacía falta que me fuera a trabajar más.
Pero ¿se ha confirmado que no es celíaco o intolerante a lactosa, verduras crudas, pieles de frutas y demás?

Unknown dijo...

Yo tampoco acostumbro a usar redes sociales. Qué bien que lo hayas puesto por aquí. Aunque alegría dar, no da, porque justo una o arte de eso me ha llevado a dejar de trabajar. Si sumamos las culpas maternales a las laborales, "¿ Para eso estudiaste?" " ¿Con lo bien que ganabas" " ¿Y si te divorcias?"...

Vicente Carrasco dijo...

Pues ya sabemos lo que hay que hacer, ahora que vienen las elecciones generales votamos por un cambio de política social. O igual no...

Makeda dijo...

Eres una crack. Leo y releo tu artículo y es que no se puede decir más clarito.