28 febrero 2011

Comprando aspirinas

Esta historia no es mía. Le pasó a otra persona, a la que llamaré ZJ™ para mantener su anonimato.

Un día ZJ™ fue a la farmacia a comprar preservativos.
No eran para él, era para un colega que estaba pasando una mala racha.
ZJ™ es una persona adulta y no le da ninguna vergüenza comprar preservativos. En absoluto. De hecho, los compraría en la farmacia que hay en el portal de su casa, pero decidió ir a la que hay a tres manzanas por el puro placer de caminar*.
Sí.
A un grado sobre cero y con viento que supera los 70 km/h.
Una vez llegado a la farmacia ZJ™ se dirigió a uno de los farmaceúticos.
-Hola quiero preservativos.
-¿De qué marca?
-M**rd*...
Hay una marca de preservativos a los que la esposa de ZJ™ (que es inteligente, guapa y simpática, según me han contado, que no es que yo la conozca ni nada) es muy alérgica, pero ni ZJ™ ni la susodicha esposa recuerdan nunca el nombre: la reconocen por la caja. Pero en esa farmacia no tenían las cajas a la vista, y ZJ™ no quería pedir que le enseñaran todas las cajas para ver la que era.
No es que le diera corte ni nada, era para no hacer esperar a los demás.
Sí, eso.
-Si te da igual la marca, ahora tenemos una oferta.
-¿Un 2x1?
-No.
-M**rd*.
-Si te llevas un paquete de preservativos, te regalamos un lubricante, un pack de sabores, unos dados eróticos, y ¡lo mejor de todo! puedes meter la mano en la caja y coger un regalo sorpresa.
ZJ™ miró a su alrededor y vio a los cienes y cienes de personas que esperaban turno.
-¿Qué marca es?
-Marca Firlollo.
-¿Y si me llevo de esa tengo que coger todos los regalos?
-¡Sí!
-Pues deme de la otra.
Todavía debe estar la farmaceútica preguntándose qué pudo fallar en la estrategia de markéting.





*Para ser justos, ZJ™ fue a esa farmacia porque siempre tienen oferta 2x1. Es que si no no cunde. No es por presumir; a fin de cuentas no conozco al tal ZJ™ de nada.

22 febrero 2011

F*ck*ng Beckham

Una de las cosas que más me preocupaban de estudiar inglés era el examen oral.
Al contrario de lo que puede parecer, soy supertímida.
Mucho, mucho, mucho.
Y vergonzosa.
En el sentido de que siento vergüenza, no de que doy vergüenza.
Por desgracia, no es una timidez de encogerme sobre mí misma cual bola.
Bueno, depende.
A mí lo que me pasa es que me pongo nerviosa, y empiezo a hablar mucho, y cuánto más hablo más tonterías digo y cuántas más tonterías digo más nerviosa me pongo y así en un círculo vicioso de chorradas y nervios.
Es horrible.
Y lo peor es que nadie se da cuenta de lo mal que lo paso, porque me ven hablar así, tan alegremente.
Por eso mi mayor preocupación en el examen oral no era quedarme muda de espanto, sino decir cualquier horror, y no poder volver a clase nunca más.
El día del exámen escrito la profesora disipó todos mis temores.
-Sólo tienen que hacer el examen oral lo que aprueben el examen escrito.
Ah, menos mal. Por que ni de c*ñ* voy a aprobar después de lo que hice, jijiji, el sistema educativo no está tan mal, ¿verdad?
Y entonces voy y apruebo.
Mierdaaaaaa.
Tres días más tarde me tocó ir al examen oral, que consistía en hablar sobre un tema que propusiera la profe. Entramos en clase, nos sentamos en círculo, y la profe miró a la primera.
-Háblame sobre tus últimas vacaciones -le dijo.
Y la compañera se explayó hablando de sus vacaciones.
-Cuéntame que opinas de la dieta mediterránea-le dijo a la siguiente.
Y la compañera se explayó hablando de la comida.
La siguiente era yo. Había entrado al examen muy nerviosa, pero después de las dos intervenciones me había relajado. Por favor, ¿vacaciones? ¿comida? ¡Esto está tirado!
-Lorz, te toca.
-Cuando quieras.
Y pensé para mis adentros "¡JA!".
-Dime, ¿crees que los sueldos millonarios que reciben algunos futbolistas desvirtuan la esencia del fútbol como deporte?
Por supuesto, sólo hay una respuesta posible a esa pregunta:
-WHAT THE F*CK?
Y entonces voy y apruebo.



Pd.: Del resto de mi discurso sólo recuerdo haber gritado "I don't f*ck*ng care about f*ck*ng Beckham!". Supongo que me dieron puntos por la riqueza de mi vocabulario.

17 febrero 2011

Eurovisión 2011

Mañana, por fin, sabremos quién representará a España en Eurovisión este año.

Rebobino: Eurovisión es un concurso que se celebra una vez al año en el que cada país europeo (y algunos que no son europeos y nadie sabe que pintan ahí) manda un representante. El representante canta, cada país vota, y el país que gana recibe el dudoso honor de ser quien organice el concurso del año siguiente. España solía elegir sus representantes (para Eurovisión) a dedo. Luego se inventaron los sms y la c*g*m*s. Tampoco es que antes nos fuera muy bien.
Este año se ha llevado a cabo un sistema intermedio entre la dedocracia y la democracia. Yo lo llamo demodocracia. Ya lo he patentado y todo. La parte buena es que cualquiera podía presentarse. Cualquiera. Lo único que había que hacer era enviar un vídeo cantando algún éxito de las Eurovisiones anteriores.
De entre todos los candidatos se elegían a unos pocos, que actuaban en la tele y se iban haciendo cribas hasta que sólo quedara uno, como en Los Inmortales.
No he visto los programas, no he seguido las noticias, y en general no tengo ni idea de quiénes son los candidatos, pero estoy segura de que, sea quien sea, tiene posibilidades de ganar este año.
Jijiji, lo siento, es que cuando miento me da la risa tonta.

Por desgracia, sea quien sea no será un representante legítimo.
Ya está, ya lo he dicho.
Porque en el casting que se ha hecho ha habido tongo.
Ya está, ya lo he dicho.
Espera, eso ya lo he dicho.
M**rd*, creo que me he puesto en bucle.

Sí, sí, ha habido tongo, porque si la elección hubiera sido de verdad limpia, justa, clara y cristalina, me habrían elegido a MÍ.
Y la prueba es que el vídeo de mi candidatura es el mejor de todos; juzguen ustedes mismos:




Bueno, no, mejor no juzguen.






Pd: Este es el vídeo que intentábamos parodiar. Y digo "intentábamos" porque claramente no lo conseguimos.

15 febrero 2011

El examen de arte

Hoy también he tenido examen, pero esta vez de Arte.
Concretamente (o sea, con forma de concreta) de Historia del Arte de la Antigua Edad Media, que es una asignatura muy bonita para quién se la haya estudiado.
En mi caso, no puedo opinar.
Como tengo la licenciatura en Historia, pensé que no hacía falta que me mirara esta, porque me conozco todo el contexto y para aprobar sólo necesito comentar un poco por encima la imagen y enrollarme con lo que ya sé.
Así fue como aprobé el exámen de oposición.
Mentira. En realidad aprobé porque el día de antes no me apetecía estudiar y me puse a leer un libro en el que de forma totalmente casual hablaban de la imagen que cayó. De verdad.
Una vez más, mi técnica de estudio ha dado un buen resultado, porque las imágenes que había que identificar eran superfáciles.


Señora envuelta en cortina haciendo juegos malablares.

Ángel interrumpiendo una orgia para avisar de que un ninja (o Batman, según otros eruditos) ha lanzado una de esas estrellitas metálicas que se clavan.

Fila de señores haciendo el trenecito. Los de abajo están cabreados porque no les han invitado. Lógico. Imagina la de vaselina que habría hecho falta, con lo grandes que son ellos y lo pequeños que son los otros.

Señor alegrándole el día a un león.


Anuncio de desodorante.


Y ahora le voy a mandar un correo al profe para decirle que no se moleste en publicar la nota, que ya sé que tengo sobresaliente.






Pd: Otros estudiosos del tema, con unos conocimientos inferiores a los míos, han dado otras interpretaciones a estas obras de arte. ¿Alguién sabe como llaman (erróneamente) a estas obras? Piruleta para el primero.

09 febrero 2011

El exámen de inglés

Mi profesora de francés creía que la mejor forma de aprender el idioma era a través de canciones.
Su idea era que, al ser más divertido que una clase tradicional, prestábamos más atención, y todas las palabras, estructuras y sonidos que escuchábamos quedaban grabados en nuestro subsconciente sin que nos diéramos cuenta, listos para aflorar en el momento preciso.
Por algún extraño motivo, después del examen cambió de opinión.
La culpa es suya por ponernos canciones con palabrotas.

Estos días, cuando me he estado preparando para el examen de inglés, he seguido el mismo método: en lugar de estudiar me he dedicado a ver series y películas en versión original, con la esperanza de que el día del examen un manantial de conocimiento brotara de mi interior.

A llegar al exámen, nada más leer la hoja con las preguntas, me di cuenta que de mi estrategia había sido un éxito, porque me sabía la respuesta de todas:

1.-What's your name?
My name is Gladiator.

2.-How are you?
I'm not insane! My mother had me tested!

3.-How old are you?
I'm ten, and I think your dress is the ugliest one I ever saw!

4.-Where do you live?
I live in a pineapple under the sea

5.- Where do you come from?
Somewhere over the rainbow

6.-What time is it?
It's clobbering time!

7.-What do you do?
EXTERMINATE! EXTERMINATE!

El resto de las preguntas no las contesté, porque con esto ya tenía nota suficiente para aprobar y no quería parecer que iba de sobrada.






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Sí, ya sé que no todo el mundo tiene un conocimiento de idiomas como el mío (por suerte para la diplomacia mundial).
Haciendo un esfuerzo sobrehumano voy a traducir las preguntas del examen.

1.-¿Cómo te llamas?
Mi nombre es Gladiador.

2.-¿Cómo estás?
¡No estoy loca! ¡Mi madre hizo que lo comprobaran!

3.-¿Cuántos años tienes?
Tengo diez, y creo que tu vestido es el más feo que he visto nunca.

4.-¿Dónde vives?
Vivo en una piña en el fondo del mar.
(Ahora es cuando tenéis que decir "!Bob Esponja, Bob Esponja!" Así me gusta.)

5.-¿De dónde eres?
Algún lugar más allá del arcoiris.

6.-¿Qué hora es?
¡Es la hora de las tortas!

7.- ¿A qué te dedicas?
¡EXTERMINAR! ¡EXTERMINAR!


03 febrero 2011

El meme de Cordelia

Ahora que gracias a la colaboración de Eme A mi blog es más ancho (como mi cintura, pero eso es mérito única y exclusivamente mío) puedo hacer el meme de Cordelia.

Las reglas:

1.- Decir quién te lo ha mandado.
Cordelia. Lo acabo de decir. A ver si estamos atentos.

2.- Elegir a cuatro incautos para que lo hagan.
Eh... paso. Que luego la gente empieza que si a mí otra vez no, que si a mí nunca me pasas nada... Que lo haga quien le salga del piticlín.

3. Responder las preguntas:
Eh... que no he estudiado nada...

4 cosas que hay en mi bolso

Aparte de lo habitual, siempre llevo:
-Un libro.
-La marca del libro, suelta, al fondo del bolso.
-Un papelito, frecuentemente arrugado y casi ilegible, con una fecha o un número de teléfono que no tengo ni idea de a qué corresponde. No se trata del mismo papelito: a medida que lo tiro suele aparecer otro.
-Un caramelo y/o gominola cubierto de pelusa.

4 cosas favoritas de mi habitación
En mi habitación sólo hay cuatro cosas:
-Una cama.
-Una mesilla.
-Una lámpara.
-Ocasionalmente, también está ZaraJota™.

4 cosas que siempre he querido hacer
-Chuparme el codo.
-Leer el pensamiento.
-Ver sin gafas.
-Ser mosquetero del rey al servicio de su majestad.

4 cosas que me gustan ahora
-ZaraJota™.
-Leer en la cama.
-Coser mientras veo una película.
-El helado.

4 cosas que no sabías de mí
Eh... pero si las digo ya las sabréis, ¿no?
No sé si esto va a ser buena idea...
-Soy una maniática del orden. Antes no podía dormir si la habitación no estaba ordenada. Ahora estoy más controlada, pero hay algo que no soporto: los zapatos mal colocados. Especialmente si están pegados por la parte exterior. Me saca que quicio.
-No me gusta comer nada que lleve carne picada (croquetas, hamburguesa, salchichas, chorizo, albóndigas, lasaña, morcilla...) porque me da pena que dos animalitos que no se conocieron de nada en vida acaben mezclados contra su voluntad después de muertos. Por el mismo motivo no como carne de cocido. Hay una excepción a la norma: las salchichas marca día y las hamburguesas fast food, porque no creo que lo que llevan sea realmente carne.
Bien pensado, quizá esto esté relacionado con mi obsesión por el orden.
-Adopté a Arale-Chan porque no podía tener un bebé (ni podré en una temporada, dejad de preguntar).
-Odio los perros. Los odio mucho. Nunca haría daño a ninguno, pero si mañana desaparecieran de la faz de la Tierra no los echaría de menos. La gente suele pensar que es porque me dan miedo, pero no. Bueno, los perros de cien kilos con tres hileras de dientes, ojos inyectados en sangre y eso sí, pero hasta el momento no me he cruzado con ninguno.



4 canciones que no puedo quitarme de la cabeza


-El dichoso opening de Misfits


-Tots som pops, de La Trinca.

Aunque con una traducción muy libre que hice yo misma y que incluye unas cuantas palabrotas.
Esta canción me gusta mucho y pedí que alguien la cantara durante mi boda (sin las palabrotas), pero hubo una férrea e incomprensible oposición.

Eh... se supone que debería poner otras dos más, pero por lo general no suelo tener más de dos metidas en la cabeza.
Algunos dirían que no caben.
Mi teoría es que me gusta paladear las que tengo.

Y ahora, ¿alguien se anima?