31 octubre 2010

Halloween 2010

-Era una noche oscura de tormenta. El viento agitaba las copas de los árboles, las negras nubes de tormenta arrojaban trombas de agua helada, rayos y centellas...
-¿Rayos y centellas no son la misma cosa?-preguntó la vieja y malvada bruja.
La Arcana de las Brujas levantó los ojos del Libro Secreto para buscar el origen de aquella voz aguda e irritante que la había interrumpido en lo mejor de la historia.
Con sus ojillos de araña recorrió las doce caras de las brujas del pequeño aquellarre.
-Por supuesto, tenía que ser ella -dijo en cuanto llegó al punto en el que estaba sentada la vieja y malvada bruja.
No sabía por qué la seguían invitando a las Reuniones Secretas de Plenilunio en el Claro del Bosque Junto a la Peña con forma de Cabrito.
Es decir, es cierto que reunía todos los requisitos y pagaba su cuota como todas, pero era tan... auténtica. A veces la Arcana sospechaba que los harapos eran de verdad. Y el olor corporal... No parecía de la misma marca que el que compraban el resto de la brujas. A decir verdad, daba la impresión de que no era comprado en absoluto, y algunas de las chicas pensaban que era, digamos, de fabricación casera.
Para rematar, no parecía tomarse en serio el Libro Secreto. En ocasiones se había dormido mientras la Arcana leía, y otras daba la impresión de reírse por lo bajo. Y todas esas preguntas estúpidas...
-No son la misma cosa, Hermana en la Oscuridad, las centellas son como los rayos, pero más pequeñas.
-¿Más pequeñas?
-Exacto.
-¿Y cómo se mide el tamaño de un rayo? ¿Por la altura? ¿Por el ruido? O, no, espera, debe ser por los voltios...
-Esas cuestiones han de ser decididas por seres que han alcanzado un nivel superior de sabiduría -anunció la Arcana poniendo su voz trascendental.
-¿Lo qué?
-Hombres -, le aclaró una de las brujas del fondo. La Arcana le lanzó una mirada de odio. A la hija de la lechera le faltaba un hervor, como a la leche que vendía.
-¿Podemos seguir con la lectura del Libro Secreto o no?
-Mujer, muy libro no es: es un folio doblado por la mitad. Deberíamos llamarlo el Folleto Secreto.
-De Secreto nada, nos lo sabemos todas de memoria, como lo lee en cada Reunión Secreta de Plenilunio en el Claro del Bosque Junto a la Peña con forma de Cabrito...
-Ahora que lo mencionas -terció otra de las Hermanas en la Oscuridad-, a mí no me parece que tenga forma de Cabrito. De Boñiga, a lo mejor, pero de Cabrito nada.
A la Arcana se le estaba acumulando la presión sanguínea sobre el párpado del ojo derecho, que temblaba ligeramente.
-¿Queréis que sigamos con el Aquelarre o qué?
Un par de voces murmuraron "¡o qué! ¡o qué!" por lo bajo, y después el silencio volvió a reinar en el círculo.
-Bien... -la Arcana recuperó su voz trascendental- rayos y centellas surcaban el cielo, trazando brillantes telas de araña...
-En realidad -interrumpió la vieja y malvada bruja-, las telas de araña suelen tener un diseño matemático, casi diría que geométrico.
-Además si te pica una araña te dan ganas de vestir de licra -añadió la hija de la lechera, con la sonrisa satisfecha de quien cree estar aportando una pieza vital de información.
-Así nunca conseguiremos convocar a los espíritus...
-Mejor, que lo mismo quieren también bollos y sólo he traido una docena -terció la Hermana en la Oscuridad a la izquierda de la Arcana, de profesión panadera.
A la Arcana se le acabó la paciencia.
-¿Pues sabéis lo que os digo? Que renuncio -y se quitó la Capucha Ritual-. Que os den pomada. Me voy a mi casa, que es muy tarde, hace mucho frío y una ya tiene una edad para estar aguantando tonterías.
-Jo, no te enfades...
-Y el Libro Secreto se lo podéis meter a la Peña con Forma de Cabrito por el [suprimido por taco].
La ex-Arcana arrojó la hoja de papel al suelo y se marchó. La noche era oscura y al momento desapareció tragada por los árboles que rodeaban el claro.
-¿Qué hacemos ahora?
-Pues yo he traído unos bollos...
Las Hermanas en la Oscuridad encendieron una fogata y se sentaron alrededor para comerse los bollos mientras charlaban sobre las pequeñas cosas de la aldea.
Distraídas, ninguna de ellas notó como la vieja y malvada bruja se apartaba del grupo para recoger del suelo el Libro Secreto.
La vieja y malvada bruja echó un vistazo rápido al texto y sonrió satisfecha.
Ahora que era suyo nada podría detenerla.

11 comentarios:

Chache dijo...

¡Miedo! o.O

Light Shine dijo...

"Que os den pomada"

Esto me ha encantado, creo que de ahora en adelante usaré esta frase, aunque tenga que pagar derechos de autor.

Por cierto Lorz, ninguno de mis comentarios en twitter ha sido respondido *cara del gato de Shrek*.
Y la entrada me ha dejado con intriga, quiero más.

El Hombre Malo dijo...

Cuando Terry Prachett por fin la termine de espichar el pobre, te voy a poner un enano con latigo para que te obligue a hacerle la suplencia.

Necio Hutopo dijo...

Pues sí, eso de arriba, que esto es un poco de Yaya Ceravieja... Menos mal que no hubo lo del baile sin calzones...

Themila dijo...

Jijiji... "cuando te pica una araña te dan ganas de vestir de licra"!!!! JAJAJAJAA.
Tiene que haber más capitulos, no nos puedes dejar asi! :D~~

Camaleona dijo...

Tanta mujer junta no puede traer nada bueno... y si además son brujas...

Anónimo dijo...

Creo que hablo en nombre de todos si digo ¡queremos que Lorz cante la canción del puercospín!

JuanRa Diablo dijo...

Los jalogüines de hoy ya no son como los de antes. Ni de lejos! Este ha sido puro tomate.

(La Karmele estaba ahí metida también, ¿no?)

anselmo dijo...

Tu tradicional cuento de La Noche de los Walpurgis. Y esta vez con un marcado homenaje a Terry Pratchett. Cada día te superas más.

Mae Wom dijo...

Jajaja! Me ha encantado. Yo también me incluyo en el "quiero más".

lorzagirl dijo...

Chache, buu!

Ligth Shine, pues no lo entiendo. Voy a necesitar clases de Twitter, ya lo verás.

El Hombre Malo, pues que viva muchos años, porque aquí la nena no está a la altura.

Hutopo, no, no, aquí no se hacen guarrerías.

Themila, uno por cada Halloween. Más que nada para que me de tiempo a pensar cómo seguir.

Camaleona, no sé si son muy brujas, me da que lo que tienen es ganas de fiesta.

Anónimo, eh... (ejem,ejem)... "A UN PUERCOESPÍN NO SE LE PUEDE [suprimido por taco]/ POR MUCHO QUE LO INTENTES/TIENE ESPINAS POR TODAS PARTES/SE CLAVAN CUANDO SE LA [suprimido por taco]". O algo así.

JuanRa, ¡spoiler!

Anselmo, no pretendía homenajear a nadie, pero supongo que cualquier cosa sobre brujas con un poco de gracia suena a Tata Ogg, Yaya Ceravieja y demás.

Mae, ¡próximamente en sus pantallas! Voy a tener que ponerme a pensar en cómo seguir...