29 septiembre 2009

¡Otra fiesta!

Primero llegó un dibujo desde Chile (gracias, Eödriel y secuaces).

Después llegó un poema (aquí no voy a decir quién ha sido, que no tengo el nick):

Oh, Arale Chan, Arale Chan,
hija de Lorzagirl.
Bicho molón, mascota universal de bloggueros.
Oh Arale Chan, Arale Chan,
hija de ZaraJota,
dialecto conejil tú hablas, credo
del primer misterio nuestro.
Y te queremos comer/adoptar/secuestrar/perseguir:
Por tu fotogenia de top model.
Por tus ojitos tan burlones.
Por aquella aventura loca
en el bidet de tus mondongos.
Sí, amigos, en el blog de Lorz
una cobaya es para siempre.
Piyú. Pásate por mi Facebook.

Fin.


Luego Rodros mandó una postal:


¡Con regalo!

Y para rematar, este fin de semana estaba en la fiesta*-de-cumpleaños-ligeramente-atrasada-de-Be cuando uno de sus amigos de verdad** se acercó a mí y me dijo:
-Hola, no me acuerdo de cómo te llamas, pero eres la chica de Arale-Chan, ¿verdad?

Ejem...

¡¡¡LA P*T* RATA ME ESTÁ ROBANDO PROTAGONISMO!!!

*La palabra fiesta se queda un poco corta. Habría que inventar otra.
**No sé si la palabra amigos es la más correcta. Creo que sería más adecuado llamarnos plaga: una plaga que se atrinchera junto a los sandwiches y que muerde al resto de los invitados si tratan de acercarse a la bebida. Puede que incluso intentáramos cobrarle entrada a algunos invitados. Pero poco.

23 septiembre 2009

Toda fiesta tiene un mágico fin de fiesta

Primero me puse pocha yo.
Después se puso pocho ZaraJota™.
Después no pudo ser porque no pudo ser, y además fue imposible.
El caso es que con la tontería vivimos una temporada de sequía estival propia del clima mediterráneo pero impropia de una pareja joven y saludable (es un decir) como nosotros.
Vaya, que nuestra vida sexual era más triste que la de los puñeteros helechos con sus puñeteras esporas.
Peeeeeeero todo pasa, y un buen día estuvimos en condiciones de atrincherarnos y recuperar un poco.
Menos mal.
Al día siguiente estaba aburrida en el trabajo y pensé que sería muy buena idea recordarle a ZaraJota™ lo que habíamos hecho la tarde anterior, y de paso dejarle claro que quería más.
Le llamé, pero no me cogió el teléfono y tuve que mandarle en sms:

Otro fin de semana sin sexo. Yo así no puedo seguir... O me haces cositas esta tarde o empiezo a acosar a Rata-Chan.

Y le di a enviar.
Mi movil mola mucho.
Primero porque es de Hello Kitty, claro, y segundo porque no tienes que buscar en la agenda: el móvil siempre recuerda el último número al que le has enviado un mensaje. Le das a enviar-enviar y lo manda a la misma persona.
Por desgracia la última persona a la que le había enviado un mensaje no era ZaraJota™:


Era Hermano Pequeño.


Colorada como un tomate llamé a ZaraJota™:
-¡¡¡La he liado!!! ¡¡¡La he liado!!!
-¿Has vuelto a confundir el ascensor con el baño de señoras?
-No. Bien pensado, sí. Pero no es eso.
-¿Qué has hecho?
-Te he mandado un mensaje eróticofestivo.
-No he recibido nada.
-Porque se lo he mandado a Hermano Pequeño.
-¡ARG!
-Sí, ¡ARG!
-Bien, tranquilicémonos, ¿qué ponía?
-Eh... Algo así como que estoy insatisfecha y quiero una solución ya.
-¡No puede ser!
-¡Sí que puede, sí!
-¡Tienes que llamarle ahora mismo y explicárselo!
-Hombre, seguro que se ha dado cuenta de que el mensaje no era para él.
-¿Y eso qué? ¡¡¡Lo que tienes que dejarle claro es que yo no te dejo insatisfecha!!!
Me parece que hay algunas divergencias en la definición del problema.

21 septiembre 2009

Esta noche hay una fiesta, 5 y ya

En capítulos anteriores...
Me quedé sin souvenir. Eso me pasa por hablar.

Unos días más tarde, estaba en mi casita estirada en el sofá cuando llamó Latita.
-Hola sobri. Me han dicho tus padres que has tenido un cólico nefrítico.
-Sí. O dos.
-Dicen que duele como un parto.
-Pues se va a preñar quien yo me sé.
-Mujer, no seas así. Aunque duela lo mismo, no tiene ni punto de comparación.
-Ya, claro.
-De verdad. El cólico te duele mucho, y te fastidias. El parto duele mucho, pero sabes que el dolor pasa, y luego tendrás a tu bebé, y es una experiencia maravillosa: cuidarle, darle de comer, ver como aprende a caminar... y entonces crece, y te dice que no le comprendes y luego se compra un mp3 y no vuelve a hablarte nunca, más que para pedirte que le des dinero, o le compres cosas, pero "no, mamá, esas zapatillas no", claaaaaaro, el niño las quiere de marca...
-...
-Bien pensado, el cólico nefrítico es mucho mejor que un parto.
Verás si al final encima voy a tener que estar agradecida.

16 septiembre 2009

Esta noche hay una fiesta, 4

En capítulos anteriores...
La prueba física está relacionada con el olor de las nubes. No voy a dar más detalles.


El médico, en lugar de llamar a los señores de la bata blanca, lo que hizo fue enchufarme un tubito en la vía.
-¿Y esto?
-Calmantes.
-Um... Calmantes bueeeeeeeeenos...
Entonces entró ZaraJota™.
-Lorz -me dijo-, voy a llamar a tu madre.
-¡¡¡NO!!! Pase lo que pase -le dije entre la nebulosa de las drogas-, no... llames... a... mi ma... dre.
Cuando volví a abrir los ojos lo primero que vi fue a mi madre.
-¡Hola hija!
-¡¡¡ARG!!!
-¿Te duele?
-Sí. La traición de ZaraJota™, eso me duele. ¡Te dije que no llamaras a mi madre!
-Tu padre también está aquí.
-¡¡¡ARG!!!
-Enfermera, a la niña le duele.
-Ya le he puesto otro tubito.
-¡¡¡No tenías que haberles llamado!!!
-Es que si te pasa algo tu madre me mata.
-¡¡¡Traidor!!! ¡¡¡Adulasuegras!!! ¡¡¡Es que me lo cargooo!!! -grité. Bueno, eso creía yo. En realidad, por efecto de las drogas lo que grité fue "¡¡¡Tambor!!! ¡¡¡Ata la cuerda!!! ¡¡¡Arsa calor!!!". Si alguien me hubiera hecho unas palmitas me habrían quedado unas sevillanas estupendas.
La siguiente vez que abrí los ojos lo primero que vi fue al médico.
-¿Cómo te encuentras?
-Bien.
-Tienes una infección renal.
-Imposible: no me he acercado a un reno en mi vida.
-Vamos a darte el alta, pero tienes que tomar medicación y beber mucha agua.
-Okidoki.
-Muy bien, pues ya puedes irte a casa.
-...
-De verdad, puedes irte.
-Es que todavía tengo la vía puesta.
-¿Quieres que te la quitemos?
Um... ¿me dejarían llevármela de souvenir?

15 septiembre 2009

Esta noche hay una fiesta, 3

En capítulos anteriores...
ZaraJota™ da miedo.


Cuando por fin llegamos al hospital nos encontramos un botellón en la puerta: un montón de chavales con el cuello del polo subido y pulseritas con la bandera y niñas encaramadas en tacones más largos que sus faldas y los ojos pintados como un oso panda.
A medida que nos acercamos nos fuimos dando cuenta de que no era el botellón, sino el afterauer, y que los chavales habían llegado acompañando a los colegas... pero que no eran tan colegas como para quedarse esperando con ellos dentro.
En la sala de espera nos encontramos a una de las chicas, con el tobillo hinchado como una pelota por haberse esmorrado con los tacones, a un chaval con una puñalada, y a una señora sospechosa de gripe a, a la que habían dado una mascarilla pero que como le molestaba la llevaba colgando del cuello.
Fiestaaaaa...
Por suerte no tuve que quedarme allí mucho tiempo porque el médico me llamó enseguida.
-¿Qué te ocurre?
-Que me duele aquí, aquí, aquí y aquí.
-¿Vomitas?
-Deme 30 segundos.
-¿Cólico?
-No. No me da tiempo.
-¿Estás embarazada?
-No.
-¿Seguro?
-Seguro.
-¿Cómo de seguro?
-Si me deja ir al baño un momento le traigo la prueba física.
-Eh... No, vale. No estás embarazada.
A continuación me pasaron con la enfermera.
-Te vamos a poner una vía.
-Pues que sea de dos carriles, oiga.
-Y te voy a sacar sangre.
-Vale, pero cuando terminen con ella quiero que la donen a un vampiro necesitado.
-Dame tu mano.
-Tooooooooma la mía.
-Eh... ¿tú estás segura de que te duele?
-Sí, lo siento. Es que cuando me pongo nerviosa digo muchas tonterías.
-No hay motivo para ponerse nerviosa.
Eso es lo que dicen siempre, y luego vienen los señores de la bata blanca.

09 septiembre 2009

Esta noche hay una fiesta, 2

En capítulos anteriores...
Mi abdomen no es normal. Pues vaya novedad.


Eran las seis de la mañana de un sábado, y ZaraJota™, mi abdomen anormal y yo teníamos que llegar hasta el hospital.
-No te preocupes Lorz -me dijo ZaraJota™- voy a parar a un taxi y estaremos allí en cinco minutos.
ZaraJota™ se puso en el bordillo en la típica pose de sota de bastos, y para que no estuviera solo yo me puse justo al lado a potar a intervalos regulares de 30 segundos.
Curiosamente, entre pota y pota veía que pasaban muchos taxis libres, pero no sé porqué ninguno paraba. Es como si les diéramos miedo. Que raro.
Al final ZaraJota™ se rindió.
-Vamos a tener que caminar un poco.
-Eso le dijo Moisés a los judíos cuando salieron de Egipto.
-Es sólo hasta una parada de taxis.
Empezamos a andar, y, afortunados nosotros, nos encontramos un taxi parado justo delante de una cafetería, con todas las luces encendidas como un tiovivo.
Yo seguía potando a intervalos regulares, así que le supliqué a ZaraJota™ que entrara y le suplicara al taxista que cuando terminara el café nos acercara al hospital.
Y eso hizo.
El taxista miró a ZaraJota™, con su aspecto de tengo-doce-años-y-me-he-escapado-de-casa y luego me miró a mí, potando en un parterre.
-Eh... es que es mi día libre. Sí. Eso.
Jo, que mala suerte.
Salimos a la calle (poté un poquito más) y justo pasó otro taxi, que pasó de largo, pero se tuvo que parar en un semáforo en rojo unos metros más adelante.
-Voy a correr hasta allí y volvemos a buscarte -dijo ZaraJota™, y salió corriendo.
Jo, nunca había visto a ZaraJota™ correr.
Se pone supersexi.
Bueno, al menos a mí me parece supersexi. El taxista miró por el retrovisor y vio a un pimpollo delgadísimo, palidísimo y con una camiseta negra con una calavera estampada correr hacia su taxi, y se olvidó de que el semáforo estaba en rojo: pisó a fondo y escapó a toda velocidad.
Yo empezaba a sospechar que los taxistas no nos querían llevar, pero ZaraJota™ no se rendía, y además el último incidente le había dado una idea: a partir de ese momento esperamos agazapados junto al semáforo, y al final pillamos a un incau... taxista que accedió a llevarnos al hospital.
Nos subimos y, unos 30 segundos más tarde, sentí la llamada de la naturaleza.
Me tapé la boca y le hice un gesto a ZaraJota™
-Disculpe -le dijo al taxista-. Mi novia necesita devolver.
Jo, que pedazo de frenos tenía el coche ese: pasamos de 100 a 0 en milésimas de segundo.
-FUERA. DE. MI. COCHE.
Definitivamente probado: lo que pasa es que ZaraJota™ les asusta.

08 septiembre 2009

Esta noche hay una fiesta, 1

Probablemente una de las mejores cosas de los sábados es poder dormir hasta tarde.
Sin embargo, hay una cosa que es incluso mejor: despertarse en la madrugada del sábado con un dolor de cuerpo que no sabes de dónde ha salido, pero sí dónde se puede meter.
Como me parecía mal ser la única que disfrutara del momento decidí despertar a ZaraJota™.
-Oyes, despierta, que creo que estoy enferma.
-Eso no es ninguna novedad -contestó, se dio la vuelta y siguió durmiendo.
-Pero normalmente no poto sobre tus zapatillas.
Eso parece que le despertó de golpe.
-Será mejor que vayamos al médico.
-Vale [pota incontrolada].
Salimos a la calle, paramos un taxi, y nos subimos.
-Es posible que le pote un poco la tapicería -le dije al taxista, pero me tenía que haber callado, porque a partir de entonces el taxista estuvo más pendiente de su tapicería que de otra cosa.
A lo mejor por eso nos perdimos.
Dos veces.
Cuando llegamos al médico yo ya estaba un poco desesperada.
Que me dolía mucho la tripita, jo.
El médico me dijo que me levantara la camiseta y empezó a apretar.
-¿Le duele aquí?
-¡SÍ!
-¿Y aquí?
-¡SÍ!
-¿Y aquí?
-¡Que sí!
-¿Y a...?
-¡¡¡EN TODAS PARTES, JODER!!! ¡¡ME DUELE EN TODAS PARTES!!!
-¿Y aquí?
-Pues mira, ahí no.
-¿De verdad?
-No.
A continuación el médico me dio permiso para volverme a poner la camiseta, se sentó y empezó a teclear al ordenador.
Tecla a tecla.
Muy despacio.
Despacicísimo.
-Oiga, que me duele la tripita.
-Ya. Mira, vas a tener que ir al hospital para que determinen si es necesaria cirugía.
-¿Cirujía? ¿Por qué?
-No te lo puedo decir.
-¿Es una adivinanza?
-No, es que no lo sé.
-¿Y van a abrirme sin saber lo que tengo?
-En el hospital te lo dirán. Yo lo único que puedo decirte es que tu abdomen no es normal.
Siempre pasa lo mismo: cuando no saben la respuesta te faltan el respeto.

02 septiembre 2009

Blutúz

Un día, al llegar a casa, me encontré a ZaraJota™ totalmente desolado.
-¿Qué te pasa? -le pregunté. No es que me importe, es que me gusta hablar.
-¡TE DIGO QUE ESTO NO FUNCIONA! -decía una voz de fondo.
-¿No los oyes?
-¡YA LO HE PROBADO!
-¿Son los Joder Amor?
-¿OTRA VEZ QUIERES QUE LO APAGUE?
-Sí. uno de ellos. Lleva toda la tarde discutiendo por teléfono.
-JODER, ES QUE ESTOY HASTA LOS COJONES... VENGA, YA ESTÁ APAGADO.
-Para variar.
-LO ENCIENDO... METO EL PIN...
-Y encima no sé qué le pasa al móvil, que no para de pitar.
-JODER AMOR, QUE ME HE EQUIVOCADO...
-¿A ver?
-OTRA VEZ: ASPERISCO... ASPERISCO...
-Mira.
-ASPERISCO... ASPERISCO...
-Parece como si alguien se estuviera intentando conectar por blutúz.
-Sí.
-VOY A CONECTAR...
-¿Has probado a darle a aceptar?
-ACEPTAR...
-No, dale.
-ESPERA, QUE ESTÁ PENSANDO...
-A veeeeer... ya está: conectado.
-YA ESTÁ. ME SALE UN CONTACTO...
-¿Y ahora?
-JODER AMOR, ¿QUIÉN COÑO ES ZARAJOTA™?
Ahora es cuando lo busca en internet y viene a darme una paliza.


Pd.: Iba a decir que esto parece un post de Sark, pero cuando lo he previsualizado parece más bien un homenaje al Barça.