16 junio 2006

Bonus track

Esto se lo dedico a mi papá, que me llevó al trabajo con gran riesgo para su patita pocha.

Y también a todas aquellas personas que han protestado, sin casi recurrir a la violencia (en la cabeza no, que estoy estudiando) porque no había nada nuevo.


Una de las cosas que más me gustan de el Metro de Madrid: vuela es su capacidad para superarse a sí mismo incluso en circunstancias adversas.
Por ejemplo, ayer mismo demostró que cuando llueve es capaz de funcionar incluso aún peor que de costumbre.
Para empezar, nada más llegar, me encontré con un segurata precintando con cinta azul la entrada.
-No hay servicio -dijo a la concurrencia.
Entonces llegó otro segurata.
-Ya hay servicio, pero sólo en un sentido.
-¿En cuál? -pregunté, por tocar las narices, porque a mí me vienen bien los dos, soy así de apañada.
Diez minutos de discusión después los seguratas se pusieron de acuerdo sobre cuál era el sentido y qué paradas incluía, y dejaron pasar.
En el metro olía raro. No mal, raro. Como a lluvia.
También había un ruido raro. Como a lluvia.
Es lo que tiene que haya una catarata en el túnel, cayendo directa y a chorro sobre la vía.
Jo.
Estaba mirando la cascada embobada, y pensando que como aquello durara mucho iba a necesitar ir al baño en breve, cuando llegó de nuevo el segurata.
-Que el tren pasa, pero por el otro andén.
-¿Seguro?
-Sí, seguro, pero vayan al otro andén.
Cambio de andén.
Estaba llegando al otro andén cuando sonó la musiquita:
-Atención, señores viajeros, Metro de Madrid informa: debido a las fuertes lluvias el servicio estará suspendido en la línea -estática- entre las estaciones de -interferencia- y -ruido metálico indefinido- durante un tiempo estimado de más de una hora...
Entretanto empezó a llegar gente.
Primero llegaron dos operarios con su mono de trabajo y todo. Bajaron a la vía y se quedaron mirando la cascada, mientras negaban con la cabeza.
Luego llegaron dos señores trajeados con su maletín y todo. Bajaron a la vía y se quedaron mirando la cascada, mientras negaban con la cabeza.
Poco después llegó el grupo de limpieza con sus fregonas y todo. Bajaron a la vía y se quedaron mirando la cascada, mientras negaban con la cabeza.
Llegado a este punto un señor dijo que él también quería acercarse a ver, y el segurata le dijo que vale, así que bajó a la vía y se quedó mirando la cascada, mientras negaba con la cabeza.
La vía estaba más concurrida que la M30, pero el metro no aparecía por ninguna parte.
-¿Está seguro de que han restablecido el servicio? -le pregunté al segurata.
-Sí, han dicho que ya viene.
-Pues va a ser una masacre, oiga.

10 comentarios:

Achab dijo...

Que no, que pasa por el otro lado, ains...

JPNietzche dijo...

Espera que abran el metro aqui en sevilla... Con lo "picaros y traviesos" que son nuestros politicos y constructores... Y teniendo en cuenta que hay una estacion justo debajo del rio... Supuesamente con unas mamparas para poder ver toda la mierda que tiene el rio... No quiero ni imaginarme que pasara el dia que diga el rio que quiere ver la estacion desde el otro lado de la mampara...

Anónimo dijo...

Hasta que terminen las j*d*d*s obras de la M30 le vendría mejor como eslogan "Metro de Madrid: nada".

Anónimo dijo...

Todos sabíamos que no podrías resistir sin postear nada, es obvio que de alguna forma has provocado la lluvia y un caos urbanístico para poder seguir haciendolo.

PRIMAVERITIS dijo...

¿ibas a un exámen? ¿llegaste tarde? ¿por que te van bien las dos direcciones? ¿hubo sangre? ¿te entrevistaron en la tele? ¿eras tú la histérica rubia? ¿cayó como pregunta del examen la información sobre la masacre? ¿se secó la catarata? ¿llegó el metro por la otra vía?
Chica, me dejas llena de dudas.

marga dijo...

Bueno, tendría su punto ver a todo ese grupito viendo acercarse el tren y negando con la cabeza...

J. dijo...

llevamos ya dos años y pico viviendo en Valencia. El finde anterior estuvimos en Madrid a ver a amigos y fue una experiencia muy rara ir de nuevo en metro. Era como ir en una patera...
Cuando estas ahi, no mola nada - pero desde la lejanía debo decir, que el metro de Madrid está muy bien, te lleva (cuando quiere) de cualquier sitio a cualquier sitio (siendo ambos distintos). El metro de Valencia es una full y los autobuses también, en cambio el tranvia mola...
un abrazo

Anónimo dijo...

Lo de negar la cascada es una clara fase de negación. "No hay cascada, no hay cascada, no hay cascada..."

Luego empezarán a asumir que existe.

Finalmente, con suerte, deje de llover y el agua se escurra sola hacia los desagües. Eso les llevaría al principio, y se sentirían satisfechos por su inacción.

"Cogno, es que no había cascada"

Anónimo dijo...

negar con la cabeza puede llegar a ser bueno, pero no viendo un par de luces que supuestamente vienen corriendo en tu direccion mientras te estas encharcando los pies con una catarata en media de la via del metro. joder, que pasa, ¿estamos tontos o que? que gente...

La LLave Roja dijo...

marqués de vadillo que recuerdos! yo viví allí dos años!!!no en el metro en la superficie, aun se me permite.me da la ligera sensación que hasta hemos sido compañeras de vagón y de universidad....
te lo habrán dicho millonésimas veces, pero me superencanta tu blog!lo leo a escondidas en el trabajo aun voy por este post.